BYD informó que recibió una notificación del Ministerio Público de Trabajo Brasil sobre la constructora subcontratada Jinjiang Construction que había cometido graves irregularidades tras encontrar unos 163 trabajadores en condiciones similares a la esclavitud en las obras de construcción de la fábrica en el estado de Bahía.
La empresa automotriz reiteró su compromiso con el cumplimiento de la legislación brasileña, especialmente sobre la protección de los derechos de los trabajadores.
BYD colabora con los órganos competentes y decidió romper el contrato con la constructora Jinjiang. Cabe precisar que esta empresa era el contratista seleccionado por BYD para realizar parte de los trabajos en la fábrica de Camaçari.
El fabricante chino dispuso que los163 trabajadores de esta constructora sean trasladados a hoteles, durante la última semana realizó una revisión detallada sobre las condiciones de trabajo y de vivienda de todos los empleados de las empresas subcontratadas responsables de la obra.
La constructora retenía el 60 por ciento del salario de los trabajadores y sus pasaportes, además estableció castigos para disuadirlos de renunciar, lo que las autoridades brasileñas catalogan como trabajos forzados.
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