El Fondo Monetario Internacional elevó su estimación sobre el crecimiento de América Latina y el Caribe pasando a 2,3 por ciento desde 1,9 por ciento de julio impulsado por las expectativas de una expansión acelerada en Brasil y México.
La proyección del 2,3 por ciento para 2023 sigue al crecimiento del 4,1 por ciento del año 2022, anunció el organismo internacional. La desaceleración se debe a la normalización del crecimiento junto al efecto causado de las políticas más estrictas, entorno más débil y precios más bajos en las materias primas.
La actividad del sector agrícola y servicios durante el primer semestre de 2023 impulsó la revisión al alza del crecimiento para Brasil pasando a 3,1 por ciento desde 2,1 por ciento en julio.
El crecimiento de México fue revisado al alza en 0,6 puntos a un 3,2 por ciento, atribuyéndolo a la recuperación pospandemia afianzada en el sector construcción y servicios, mientras la economía sigue beneficiándose de la demanda proveniente de Estados Unidos.
Las principales economías regionales que probablemente experimentarán una contracción en 2023 son Argentina, con un crecimiento del PIB del -2,5 por ciento, y Chile, que se estima que alcance 0,5 por ciento.
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