El dólar subió ampliamente este lunes, empujando brevemente al euro por debajo de la paridad, debido que los inversores se alejaron de los activos de riesgo en medio de los temores de que las subidas de tasas en Estados Unidos y Europa apuntan a frenar la inflación, y esto debilitaría la economía mundial.
Frente a la canasta de monedas, el dólar se apreció 0,5% para cotizar en 108,71, no muy lejos de máximo de dos semanas cuando registró 109,29 a mediados de julio.
El dólar es apoyado en sesiones recientes, debido que varios funcionarios de la Reserva Federal reiteraron una postura agresiva antes de la reunión en Jackson Hole, con los banqueros del mundo hablando sobre inflación y recesión.
El euro retrocedió después que Rusia anunciara el pasado viernes la suspensión de tres días de suministro de gas a través del gasoducto Nord Stream 1. Los inversores temen que la suspensión pueda acrecentar la crisis energética que genera fuerte obstáculo para la moneda común en los últimos meses.
El Banco Central Europeo seguirá subiendo sus tasas incluso las probabilidades de una recesión en Alemania sean mayores, debido que la inflación seguirá siendo incómodamente alta hasta 2023, detalló el presidente del Bundesbank, Joachim Nagel.
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