Las ventas minoristas subieron más de lo previsto debido al alza en combustibles, ropa y productos electrónicos en Brasil en medio de la caída en los casos de coronavirus por la variante Omicron.
Las ventas minoristas avanzaron 1,1% en febrero en comparación con enero, superando la proyección de expertos consultados por América Economista que pronóstico la cifra en 0,5%. Mientras que el aumento de enero fue de 2,1%. Las ventas subieron 1,3% informó el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística.
La demanda minorista en Brasil mejoró debido a la eliminación de las restricciones de la pandemia y por una gran movilidad. Sin embargo, los altos costos de endeudamiento e inflación, impulsados por las materias primas, perjudicaron el gasto.
El aumento de precios al consumidor significan una de los principales motivos de preocupación dentro de los votantes en un año en que esta en juego la reelección del presidente Jair Bolsonaro, o la vuelta a la presidencia de Luiz Inácio Lula da Silva.
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