Los precios al consumidor en Estados Unidos subieron ligeramente en marzo, mientras los precios de la gasolina están en franco retroceso, aunque los alquileres siguen siendo altos, escenario que mantiene la presión sobre la inflación subyacente, lo que daría pie a que la Reserva Federal vuelva a elevar sus tasas en el mes de mayo.
El Índice de Precios al Consumidor tuvo un incremente de 0,1 por ciento en marzo, tras subir 0,4 por ciento en febrero, según el Departamento de Trabajo. En los 12 meses hasta marzo, la cifra creció 5 por ciento.
Estos datos de Estados Unidos muestran que las presiones inflacionarias persistentes por encima del objetivo, lo que confirma el énfasis del Fondo Monetario Internacional en que Estados Unidos debe seguir luchando contra la inflación.
El director de Asuntos Fiscales del FMI, Vítor Gaspar cree que el endurecimiento fiscal podría contribuir a eliminar la presión al alza sobre las tasas de interés al ayudar a bajar la demanda fiscal, el funcionario además agregó que observa pocas posibilidades de que se produjera una crisis general de deuda soberana próximamente.
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