Elon Musk tomó las riendas de Twitter despidiendo a altos ejecutivos, pero dando poca claridad sobre cómo logrará alcanzar sus ambiciosos planes dentro de la plataforma de redes sociales.
El multimillonario expresó en un tuit que el pajarito está liberado, tras completar la compra por 44 mil millones, en un aparente guiño a su deseo de ver la red social con límites de contenido menos estrictos al momento de publicar mensajes.
El CEO de Tesla, expresó que quiere evitar que la plataforma sea un lugar de odio y división. Entre sus objetivos está «derrotar» las cuentas spam y hacer que los algoritmos que determinan el contenido estén disponibles públicamente.
Musk no dio pistas hasta el momento de cómo lo logrará y quién dirigirá la compañía. Pero planea recortar puestos de trabajo, dejando a los 7.500 empleados con un futuro incierto por los momentos.
El nuevo dueño de Twitter despidió al presidente ejecutivo, Parag Agrawal, al director financiero, Ned Segal, y a la jefa de políticas y asuntos legales, Vijaya Gadde, acusándolos de engañarlo, junto a los inversores sobre la cantidad de cuentas falsas que existen en la plataforma.
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