El Banco Central de Colombia seguirá con la postura restrictiva sobre su política monetaria, aunque los miembros del organismo debaten sobre el nivel máximo que deben alcanzar las tasas para enfrentar eficientemente a la inflación.
Esto se desprende del acta de la reunión del organismo central, en la que adoptaron un incremento de 25 puntos sobre las tasas de interés, para ubicarla en 13,25 por ciento.
Aunque los miembros del Banco Central confía en que la inflación empezará a ceder, los altos precios todavía están por encima de la meta fijada por el organismo. De ser necesario seguirán con las tasas en altos niveles, a diferencia de las decisiones de la mayoría de países de América Latina.
Las dudas del órgano monetario en torno a nuevos incrementos se debe al efecto que tiene las tasas de interés en la economía, con un impacto que ya es evidente.
Los funcionarios del banco central prefieren esperar a que el incremento termine por tener efectos sobre la economía. Incluso, esta postura tiene evidentes efectos sobre el debilitamiento de la demanda agregada y desaceleración de la actividad económica en Colombia, datos que son confirmados por varios indicadores.
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