La inflación subyacente en la Unión Europea probablemente alcanzó su nivel máximo, sugiriendo un crecimiento más lento en otros precios, anunció el Banco Central Europeo.
Probablemente los datos refuercen las expectativas de que el ente monetario europeo interrumpa la racha de nueve subidas seguidas de tasas de interés en septiembre, mientras vigilan de cerca la inflación subyacente.
El organismo monetario enumeró varios índices de inflación subyacente, la mayoría son una señal útil de hacia dónde van los precios al consumo en el mediano plazo. Además, añadió que la lectura de julio estaba en línea con las expectativas del Banco Central.
Según el ente monetario, los indicadores de inflación subyacente en junio se situaron entre 2,9 y 6,9 por ciento, pero los de mayor poder predictivo estuvieron en la mitad inferior de la horquilla.
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