El Banco Central de Brasil cree que es apropiado seguir reduciendo las tasas de interés en 50 puntos en las próximas reuniones del órgano monetario, para mantener la política contractiva en la reducción de la inflación.
El planteamiento es impulsado de forma unánime por los miembros del banco central tras la última reunión. En este encuentro, el organismo apostó por segunda reducción consecutiva sobre las tasas de interés de 50 puntos, para ubicarla en 12,75 por ciento.
El ciclo de reducción iniciado apuesta por un reanclaje de las expectativas y dinámica desinflacionaria, mientras que, el ajuste en el nivel de endurecimiento en términos reales tiene una dinámica más benigna para la inflación.
A pesar de existir una mejora en el escenario macroeconómico, el ente monetario cree que todavía se necesita cautela, reforzando la serenidad y moderación que expresaron en el pasado.
Los riesgos relacionados a los fenómenos climáticos, incursión militar rusa en Ucrania y política internacional de fijación de precios del petróleo generan la posibilidad que se produzcan más presiones sobre la inflación por el lado de la oferta.
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